¿Has recibido decenas de usuarios nuevos a través de la página de registro de la web desde dominios sospechosos? ¿Quieres acabar con ello y evitar las decenas de montañas de registros basura? Sigue leyendo. Te contamos cómo solucionarlo y poner fin a este incómodo problema de cyberseguridad.
De un tiempo a esta parte, muchos usuarios de Prestashop ha detectado en sus emails una gran cantidad de registros desde dominios y usuarios sospechosos. Estos usuarios generados por bots son producto de envíos masivos de publicidad. Muchos sistemas de bots son capaces de saltarse la seguridad que proporciona Prestashop y conseguir registrarse como usuarios de forma masiva.
Prestashop trato de solucionar este problema y en su última actualización fue uno de los temas más tratados. Sin embargo, si aún no cuentas con la nueva versión de Prestashop, desde Dusnic ya hemos tomado medidas como bloquear las IPs de origen sospechoso. A continuación, te hacemos unas cuantas recomendaciones para evitar este problema tan incómodo en tu registro de usuarios.
#. Modificar la URL de registro por defecto
De esta forma, los bots no tendrán acceso de momento a esta URL y por tanto no podrán rellenar el formulario de registro de forma masiva.
#. Detectar parámetros del navegador para dificultar el alta automatizada mediante scripts
Los scripts nos permiten modificar aquellos datos que necesites según los lenguajes de programación y esta ocasión, podemos utilizarlos a nuestro favor y conseguir hacer el alta de usuarios más difícil y más segura.
#. Control de datos introducidos para evitar la inclusión de URLs en los campos de nombre y/o apellidos.
Muchas veces pensamos en hacer los registros más sencillos para el usuario sin darnos cuenta que también lo serán para los bots, por ello nosotros recomendamos llevar un mayor control den los datos introducidos para evitar la inclusión de estas URLs de spam intencionado.
¿Ya sabes cómo vas a solucionarlo? Si tienes cualquier duda, estamos a tu disposición desde Dusnic.
Hay quién se pregunta porqué, nosotros preguntamos: ¿por qué no?